disneyland

este pececito no vive en chaseland

foto cortesía de ACG

La vida es injusta. El mundo es injusto. Esa es la realidad. Terribles cosas le pasan a la gente inocente todos los dias. Todos los dias. A cada hora, a cada segundo, suceden cosas horrendas e injustas a quienen menos las merecen. La vida es injusta y no parece haber mucho que podamos hacer al respecto.

Ah no! si que hay algo, hay algo. Podemos vivir en disneylandia. Podemos pensar que el mundo es un lugar justo. Que a las personas a quienes les pasan cosas malas, en realidad lo merecían. - Algo habrá hecho ese maleante- decía la canción de Fito. Podemos culparlos de todo lo que les pasa. Te violaron porque te portaste mal, porque te vestiste como no debías. Te despidieron de tu trabajo porque no trabajaste lo suficientemente duro. Te mataron porque estabas en el lugar equivocado con las personas equivocadas. Tuviste un accidente porque no te fijas, porque no manejas con cuidado. Seguramente, toda esa gente que se muere de hambre cada dia, ese pobre niño que no llegó a caminar porque no pudo jamás comer, no es tan evolucionado como tu, eso es solo una foto cruel de un periodiasta cruel, en un lugar muy muy lejano a ti, seguramente en otro planeta.

El mundo es justo. Es la vida que te pone pruebas, es dios mismo que te prueba la fe que tienes - porque te quiere- Como Job dentro de la ballena. Aguanta que todo va a volverá ser como antes.  la vida es justa, solo tienes que encontrar el balance.

Pero no hay un antes. Ni hay un después tampoco. Está solo el instante efímero del presente. La sucesión disparatada de ínfimos presentes gastándose en la memoria. La memoria haciendo lo que le da la gana con eso. Y el hambre constante de irnos muriendo. Los monstruos que voy creando con cada dibujo, con cada letra. Mi propia disneylandia.

Chaseland, jaja.

En realidad es un fenómeno bien normal. Un mecanismo más de nuestro delicioso cerebrito de monos esquizofrénicos evolucionados para que podamos copar con la triste realidad de cada día. Para eso es que tenemos la imaginación. Para eso estan los sueños, las ilusiones, el corazoncito de gelatina de frambuesa todo suave y cursilón. Para olvidar a todos aquellos a quienes les han arrebatado el corazón, las ganas de vivir, para olvidar a todos aquellos a quienes les han arrebatado su disneylandia.

Bienvenidos todos a Chaseland. Es gratis, no se cobra entrada.