jueves, 5 de junio de 2014

sopa de monoteísmo for dummies parte iv

El nombre de dios, en fenicio, arameo y hebreo.

En el pasado capítulo habíamos quedado en el análisis de las supuestas tribus "perdidas" de Israel. Hoy vamos a ver cómo es que Israel recibió ese nombre y lo que significa.

Hemos de recordar el asunto tribal de estas gentes sin tierra. Cuando no tienes tierra lo único que tienes  es a tu familia. Y la esperanza de que te acepten en alguna parte.

El señor Jacob, nieto de Abrahám llevaba en su memoria fresquecita la idea de que un dios muy poderoso habia prometido la tierra de Canaán a su familia. Y que su familia iba a ser gigantesca. Tan incontable como las arenas del desierto. Sin embargo se ve a sí mismo desterrado de su familia por su brillante idea de robarse la bendición de su padre y forzado a huir a casa de su tío Labán en otra tierra.

Ante esta disyuntiva y en plena huida, en una de las paradas del camino decide acostarse a descansar sobre una piedra cualquiera y tiene un sueño.

Vamos, como todo el mundo.

Lo importante creo yo no es el sueño en si, que vamos a ver en un ratito, lo importante es que ese sueño marca una decisión importante en su vida. El hombre desesperado y perdido que huye de su familia por haber traicionado y mentido a su padre y a su hermano sueña con una escalera que une la tierra con el cielo y por donde suben y bajan ángeles del cielo.

Quién en su vida no ha soñado con escaleras?

Aqui es donde me pongo freudiana y jungiana como les prometí. A casi ninguna persona en la edad moderna se le ocurre prestarle ateción a lo que sueña hasta el punto de crear una religión basada en eso. A algunos si, claro. Y todavía hay quien cree en eso. No estoy yo aquí para juzgar si es válido o no, sino para averiguar por qué.

Por qué una persona podía y puede cambiar su vida entera por un sueño.

Según el señor Freud, el contenido de los sueños muestra lo que la persona no desea revelar de sí mismo. Lo que la persona no puede aceptar o entender. Desde su punto de vista podríamos decir que jacob no aceptaba o entendía la idea de que un dios abstracto pudiese entregarle un pedazo de tierra concreto a una familia en particular solo porque sí. Y gracias a su sueño decide que posiblemente sea cierto que ese dios efectivamente existe y que esa tierra donde el ha dormido esa noche es una tierra sagrada.

Por otro lado el señor Jung opinaba que los sueños eran un espejo del ego. Que mostraba al individuo sus deseos inconscientes. No necesariamente aquello que a la persona  le averguenza o desea mentener en secreto sino simplemente aquello que esta en una dimensión diferente a la dimensión consciente. Y que cuando el individuo integra ambas dimensiones en su vida, entonces llega a la realización de su ser entero. Según Jung, el inconsciente es como la luz de la consciencia que le dice YO SOY.

Que casualidad que cuando los profetas preguntaban a sus ángeles varios o al dios mismo cuál era su nombre, el dios les respondía YO SOY.

La palabra yahvé significa en hebreo y en fenicio antiguo exactamente eso. "Yo soy el existe por sí mismo."

Asi que el dios todopoderoso del señor Jacob es aquel que le revela que si, que uno ES. Que uno existe como individuo. Que uno es uno y no otro. Separado de la madre, del padre de los hermanos. Uno es uno sólo y sin familia frente al universo.

La cosa es que para un pobre hombre de la edad de bronce este concepto de internalizar el SER parece demasiado grande como para meterlo dentro de su cosmología limitada al desierto y las ovejas. y especialmente para una persona cuya vida entera se ha basado en la tribalidad a la que pertenece.

En fin que Jacob decide marcar el lugar donde soñó y muy inteligentemente hace un pacto con ese "dios" que le había revelado que en efecto esa tierra era suya pues allí era donde la tierra y el cielo se reunían.
Coge una piedra y la baña con aceite y decide que si en su vida le va bien, es que en efecto dios está con su familia y el volverá a ese sitio.

Ni guevón que fuera. Si me va mal esto es mentira y yo no vuelvo. Si me va bien, entonces si.

Muy parecido a lo que hacemos todos cuando nos sucede algo malo y prometemos a nuestros padres o a nuestros dioses que si nos salva de determinadas situaciones uno va a cumplir tal o cual promesa.

Todavía no hemos logrado internalizar que único dios que importa es el dios que le da la luz a la conciencia de ser uno mismo.

Y mosca que no me he puesto a hablar del tetragramatón. Las cuatro letras de dios.

A alguien se la habia olvidado la cuaternidad? no importa, yo se las recuerdo otro día.

Dulces sueños a todos mi ávidos lectores.




11 comentarios:

  1. Si alguna vez cenamos juntos te pondré una mordaza.

    Besos.

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  2. Tengo entendido que la versión más cercana al sentido original de la expresión, cuando el dios de los hebreos dice 'yo soy el que soy', en realidad habría que leerla como 'yo soy lo que soy'.
    Claro que en español entenderíamos que dios se designa a sí mismo como una cosa y no como una persona (masculina, por supuesto).

    Cosas de las traducciones que si pensamos todas las tranformaciones que sufrió ese texto en los últimos 2300 años...

    Saludos

    J.

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    1. Exactamente Jose, yo lo que pretendo ir demostrando con esta sopa es basicamente que el Dios no es mas que un super ego colectivo. :)

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  3. Los chamanes y profetas siempre lo fliparon. Tampoco es que sean más de fiar los androides que sueñan con ovejas eléctricas (guiño a Philip K. Dick, otro que también lo flipaba bastante). ¿Por qué no usarán el sueño simplemente para dormir?

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    1. noooooou señor Xindas. Los sueños son para vivir :)

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  4. ¿Cuaternidad? ¿Se refiere a los cuates? :P

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