yo me conformaría con un par.
foto cortesía de ACG
Hace días que me ronda la cabeza escribir acerca de los excesos, y un comentario en mi blog chaseland me hizo recordar que quería hacerlo, asi que manos y neuronas a la obra, por favor. Aunque talvez no debería poner neuronas a la obra, puesto que muchas veces me sucede que más que pensar lo que quiero escribir y componer las palabras cuidadosamente para suenen hermosas cuando uno las lee en voz alta, yo lo que hago es dejarme llevar por mis manos que parece que supieran mucho mejor que yo, lo que sea que tengo que decir. Recuerdan cuando hablamos de la superabundancia y clorificacion for dummies?. Pues esto es más o menos lo mismo.
La clorificación sucede porque estamos expuestos a excesos de todo tipo constantemente. Es el momento histórico de la decadencia a base de ahogo. Nos ahoga el exceso de información que no nos dice nada, excepto que todo es demasiado y que es mejor cambiar el canal porque el mundo ya esta roto y no hay manera de salvarse, mejor distraerse que seguir intentando entender. Nos ahoga el ruido constante y repetido por todos lados en anuncios, en tráficos, en velocidades, en lemas escritos por todas partes, en músicas que se superponen a la música propia hasta que ya no podemos escuchar más nada y el silencio nos aturde. Nos ahoga el exceso, nos ahoga la prosperidad, nos ahoga la pobreza extrema que nos acusa sin que podamos entender por qué.
A mi me ahoga la velocidad, me ahogan los rostros que sonríen blandamente y no consigo comprender cómo es que la vida sigue y las personas encuentran motivos y felicidades y no se ahogan. Es un misterio. En este caso es un misterio doloroso. Y no se resuelve con pastillas, comprobado está. Me aterra la vida eterna, porque implica también un exceso, una cosa interminable que me recuerda un carrete de hilos infinitos que se desenrollan sin parar eternamente. Se imaginan el nudo que es eso?
Y ahi permanecemos. En esa red que es existir sometidos al exceso que es vivir. Y creo que ya me puse melancólica asi que mejor paramos. A ver si se desenreda esta cosa.