just keep swimming, just keep swimming
Foto cortesía de ACG
También conocido popularmente con el nombre de
Schopenhauer for Dummies.
De partida el nombre me confunde. Aburriiiiiiiido. Eso si, nunca más aburrido que yo con mi festival secreto de poesia triste y desgarrada de la semana pasada.
Y nada nuevo, lo mismo de siempre
by the way.
El principio de la razón suficiente. Es decir una ley para que las cosas tengan una razón de ser. Y este alemán lo primero que hace es estudiarse a Platón como debe ser, y recordar que "
todo deviene necesariamente por una causa, es imposible, por tanto, que algo devenga sin una causa" y nos insinúa asi de buenas a primeras y sin anestesia el principio de la
causalidad que es la base de la razón suficiente.
Pero he de decir que lo mas divertido de leerme a Schopenhauer fue el tono ególatra con el que lo escribe todo, y que me recordó inevitablemente el tono de Nietzche tan simpático también. En verdad uno debe creerse el contenedor de toda la verdad del mundo si pretende hacer filosofía de cualquier tipo. Y eso es siempre muy gracioso.
Lo que dice en resumen es lo mismo que nos dicen las abuelas o los abuelos. Que todo sucede por alguna causa. Que todo es causal y no casual.
Y su cuaternidad se define como una necesidad. Es decir para que las cosas sean es necesario que sea necesario que ellas sean y no al contrario. Y esa necesidad es cuádruple.
Necesidad física, necesidad lógica, necesidad matemática y necesidad moral. La física, la lógica y la matemática las veo claras. La moral no la veo clara. Talvez porque presupone la existencia de un ser supremo. Después el amigo H. que al parecer todo lo sabía, resumió ese principio cuádruple en uno solamente dual que es negativo y positivo, es decir que nada es sin una razón y que todo lo que es posee una razón de ser.
Hay que ver, para ser filósofo lo que hay que ser es abuelo.
Y sin embargo.
Aunque estos principios estaban supuestamente refutados en la física cuántica por el principio de la incertidumbre, que afirma que es posible saber el pasado de las partículas mas no el futuro y que por tanto la causalidad no existe, gracias a la investigación sobre la teoría del caos asociada a la teoría del tiempo de este señor
Sean Carroll de quien ya he hablado en otros momentos, puede que se llegue a demostrar que sí es posible saber el lugar preciso de una partícula a partir de el estudio de la entropía. Y las teorías de la fractalidad que también determinan cómo un sistema aparentemente caótico no es caótico en realidad.
El mundo del caos es demasiado divertido. La libertad no existe. Existe la perfecta armonía caótica.
O talvez ese ser supremo sea tan sólo supremamente caótico, ja