arroz con aguacate fase 3

pequeño esquema para ilustrar  de qué estamos hablando

y whatever is happening in between

cuaternidad for dummies

Esta bien, esta bien, vamos mas despacio pues. No les tengo que pedir que se lean  a MH cuatrocientamilveces como hice yo. La cosa al final no es tan profunda como uno piensa, casi nunca. Todo es mas o menos dos mas dos es cuatro pero con nombres rimbombantes la cosa suena mas inteligente, por lo general.

Lo que criticaba este señor en su ensayo so many years ago, era la construcción masiva de bloques de viviendas. Opinaba pues, que poner tanta gente junta a vivir en un bloque en el medio del espacio verde, como que no era muy buena idea. Y al final la historia le dio la razón, la mayor parte de los enormes bloques de viviendas construidos a partir de los años cincuenta gracias a las diligencias de Corbusier y el CIAM , dieron lugar a espacios semi-publicos-semi-privados-semi-verdes-semi-urbanos o en resumen, espacios bastante indefinidos, donde la gente que habitaba los edificios, no sabia mucho si estar o solamente pasar de largo.

Pero a lo que nos concierne aquí. Como MH era un señor filósofo muy muy serio, no podia simplemente decir que esos edificios eran un poco brutales, y que a la gente no le iba a gustar vivir en ellos; había que explicar por qué.

Y entonces HM se inventó la cuaternidad. Aclaro que en esta entrega de cuaternidad for dummies, me voy a concentrar el el concepto topólogico de la cuaternidad y no en el sicologico-religioso de Jung. A Jung lo dejamos para más tarde, cuando estemos bien almorzados.

La cuaternidad de Heiddeger tiene, obviamente, cuatro elementos y pues, un quinto que los unifica y que es caracterísitco de su filosofía y que es el "ser" o el "estar" que para MH es lo mismo aqunque en español no se escriba igual. La verdad debería llamarse quinquenidad, ja.

Estamos y somos los mortales sobre la tierra, bajo el cielo y nos conectamos y estamos en armonía con la divinidad a través de la tecnología, de lo construido, de lo hecho, porque la manifestación de estar o de ser de los mortales se hace a través de las cosas. Y para que los eres humanos podamos cumplir cabalmente tal cuaternidad, es necesario un lugar. Pero un lugar no es un lugar solamente porque sí. Un lugar es un espacio, platónicamente hablando, definido con unos límites. En este momento es donde Salingaros intervendría y diría que los límites del espacio deben ser fractales, yo pienso que los límites deben existir, al menos.

Entonces los mortales tenemos la tecnología y la capacidad de construir para poder crear lugares donde poder manifestar nuestro habitar, porque habitar es ser y estar en la presencia de la cuaternidad.

Y ahi es donde yo digo humilde y disléxicamente que para eso es que sirve la dimensión fractal, para unificar todo ese despelote filosófico del ser y del estar sobre la tierra coherentemente.

Otro día hablamos de la religiosidad de Jung y de su otra cuaternidad.

Que hasta William Blake tenía una.