un mundo del revés

imagen cortesía de este señor...

Anoche tuve uno de esos sueños loquísimos míos que me encantan y que son la causa principal por la cual me fascina mi xanax, me fascina dormir. Pero bueno, al cuento.

En mi sueño estábamos haciendo un viaje, varias personas, conocidas y desconocidas, pero yo como no tenía dinero para hacer el viaje, para variar, decidí arrimarme a buen árbol y me escabulli en el yate de un millonario disimuladamente como si fuese una invitada más. Para mi sorpresa terminé siendo efectivamente una invitada pues alli me encontré con un tío mío mejor-amigo-del-millonario y asi todos muy contentos emprendimos el viaje. Es que el mundo es un pañuelo hasta en el reino de los sueños.

Lo loco de mi sueño comenzó cuando en una de las paradas del yate del millonario, que cual crucero iba por el mar de la felicidad, notamos que en lugar de navegar estábamos en realidad volando y que los habitantes del lugar a donde habíamos llegado, caminaban en el aire paseando a sus perros tranquilamente. Entonces nos asomamos por una de las ventanas y corroboramos que efectivamente, el yate también estaba volando y que el cielo estaba a nuestros pies y la tierra sobre nuestras cabezas, pero lejos, mas arriba-abajo. El cielo era azul, azul, surcado de pequeñas nubecitas y profundo, muy profundo y la tierra era como mi adorada selva amazónica llena de Tepuyes y cascadas y loros y animales preciosos. Pero todos al revés.

A todos nos angustiaba un poco ese lugar asi que decidimos que lo mejor era subirnos de nuevo en el yate e irnos de alli. Pero al reunirnos de nuevo notamos que mi tio no estaba entre nosotros, asi que nos fuimos  a buscarlo y por el camino fuimos encontrando sus pertencias, una camisa por aqui, su bolso por allá y de paso fuimos investigando más de aquel mundo extraño donde la gente parecía querer morirse y en lugar de medicinas, se vendían virus que prometían una muerte segura.

La gente de aquel lugar hacía filas interminables para pagar por los virus y poder morirse. Pero nadie podía morirse nunca.

Por qué en un mundo donde todos volaban y parecían tan felices querría la gente morirse?

Qué podía haber de aberrante en la excesiva felicidad de poder tenerlo todo?

Finalmente encontramos a mi tío, completamente envejecido en una especie de asilo para ancianos. Las mujeres sin embargo no se veían ancianas, tan sólo perdidas y envueltas en tules, languideciendo en sus camas. Eternas mujeres maduras y hermosas sumidas y arropadas en sus sueños. Los hombres al contrario, habían perdido la razón y vagaban por el asilo hablando y hablando de sus propios sueños y alucinaciones.

Después de rescatarlo y levantarlo entre varios, volvimos al yate y ya mi tío iba despertando poco a poco de su enfermedad-ensueño. Entonces nos dimos cuenta de que habían transurrido al menos cinco años desde que habíamos comenzado a buscarlo, pero que el único que había envejecido en ese tiempo era él. Yo que nunca he sido cariñosa con mi tío, estaba  exhilarante de felicidad por haberlo encontrado y también porque ya finalmente nos íbamos de allí y el sueño ya ahí si cambio porque el millonario empezó a coquetear conmigo y eso es parte de otra historia.

Ahora que lo pienso, talvez un lugar donde no puedes despertar nunca de tus fantasías sea lo suficientemente caótico como para querer morirse?

Que opinan ustedes?